Poner la lavadora es ahora más cómodo que nunca. Rellenas el cajetín con 1,3 litros de detergente y 0,5 litros de suavizante… ¡y te olvidas durante 20 lavados! La lavadora administra el detergente justo en cada ciclo, evitando la habitual sobredosificación. De este modo ahorras agua ya que, al no haber exceso de espuma, se reduce el número de aclarados. Además evitas el riesgo de alergias, porque no quedan residuos de producto en la ropa. Y por supuesto, ahorras trabajo y ganas comodidad.
Dosificación automática: detergente, suavizante y una gran dosis de comodidad.